De encuentros

Oní:
Esto se debió haber escrito ayer, pero por azahares del destino y falta de capacidad redactora no sucedió así. Existen dos canciones de dos géneros diametralmente distintos que me llegan a la mente que hablan sobre encuentros casuales, una de trova que dice: Hoy la vi, y tenía un rostro ajeno al que yo amaba
Esta situación no sucedió así, ya que encontré nuevamente aquel rostro que me había dejado divagando, especulando y esperando que lo que había sucedido fuera real. Existe otra, ésta reggaetonera, ja, que dice: Ayer la ví por ahí, llorando... y pues tampoco queda, puesto que no te ví así, y eso me agradó.
¿A donde demonios voy con esto? que definitivamente estas dos hablan sobre encuentros casuales, y yo pienso en encuentros causales, que tienen un motivo y una razón, mis motivos ya están sobre la mesa, creo que fueron entendidos perfectamente, pero creer es un acto de fe, así que no hay nada de cierto.
Los colores que me rigen son el blanco y el rojo, y tu rojiblanca, eres el match contrario perfecto, no se que tanta perfección podría haber en un lugar en donde me encuentro yo que soy una entropía caminando, mas considero y siguiendo los lineamientos Yorubá, que Ito ban Echu, (Así debe de ser) Moducué (Gracias), y con la certeza del Alafia (Si certero en tirada de Obí) se que aquí estaremos a mi regreso. Quiero conocer el poder curativo de tus manos, y quiero poder finalmente meditar. Lo único que tengo por certeza en este momento es que ya me voy pero volveré Oní y tengo la esperanza de que el rojo y el blanco se juntarán en uno solo y algo bueno sucederá.

Por tí:
Moyubba Olofín, Moyubba Olorun y Moyubba Olordumare, Aché Elleguá, Aché Oggún, Aché Ochossi y Aché OBATALLÁ (Babá), Aché Ochún, Iyami, Yemayá mi Madre, Aché CHANGÓ, cabo Kabiolsile baba tomi, Aché Ibeyis, Aché Argayú solá, Aché Yansa e, jecua je, Aché Babalu Ayé, clasico bobo, Aché Orunmila, Aché Osháeleri Elese Olordumare.