miércoles, 1 de febrero de 2017

Requiem

Disfruté tanto tanto cada parte, y gocé tanto tanto cada todo. Que me duele algo menos cuando partes, porque aquí te me quedas de algún modo. 

Ojalá nunca sepas cuanto amaba descubrirte a los trillos de la entrega, ni el secreto esplendor con el que esperaba tu reclamo de amor que ya no llega.

¡Anda! Corre donde debas ir, ¡Anda! Que te espera el porvenir. Vuela que los cisnes están vivos, mi canto está conmigo, no tengo soledad.

Si uno fuera a llorar cuanto termina, no alcanzara las lagrimas a tanto, nuestras horas de amor casi divinas, es mejor despedirlas con un canto.

¡Anda! Corre donde debas ir, ¡Anda! Que te espera el porvenir. Vuela que los cisnes están vivos, mi canto está conmigo, no tengo soledad.


Silvio Rodríguez Dominguez.


No hay comentarios: